viernes, 20 de abril de 2018

Agricultura climáticamente inteligente para mitigar el hambre

Este proyecto del Banco Mundial ya se aplica en 21 países. Solo el año pasado, las inversiones para fomentarlo fueron de 1.000 millones de dólares, tras su compromiso de aplicar este enfoque a una escala que aumente la eficiencia y la resiliencia de los sistemas alimentarios.

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La principal actuación es la que se lleva a cabo en el estado de Maharashtra (India). Hace apenas un mes, el Banco Mundial aprobó una inversión de 420 millones de dólares en un proyecto que beneficiará a más de 25 millones de personas repartidas en un área de 3,5 millones de hectáreas y cubrirá 5.142 aldeas en 15 distritos más vulnerables al clima. De él se beneficiarán los pequeños agricultores de la zona, ya que se espera que la agricultura continúe siendo una actividad financieramente viable para ellos. Según explica esta institución internacional, "fortalecerá la capacidad de recuperación de los agricultores pequeños y marginales contra los eventos climáticos adversos mediante la promoción de tecnologías agrícolas y prácticas agrícolas destinadas a mejorar la salud del suelo, la eficiencia en el uso del agua y la productividad de los cultivos". Hay que recordar que en 2016 unas 29.000 aldeas de la zona se declararon en situación de sequía.

El proyecto proporcionará servicios de asesoramiento agrometeorológico para planificar mejor la gestión de las cuencas hidrográficas a largo plazo y apoyar inversiones en almacenamiento de agua y distribución más eficiente del agua. Con estas acciones debería aumentar la seguridad hídrica en las explotaciones agrícolas. También incentivará la diversificación de los cultivos, ampliará la adopción de semillas tolerantes a la sequía y promoverá prácticas de gestión para mejorar las condiciones del suelo.

"Los resultados del modelo de clima del estado muestran que la temperatura media anual en el área del proyecto aumentará en alrededor de 1.3 a 1.5 grados centígrados para el 2030. Es probable que el aumento de las precipitaciones durante este período se distribuya en un número menor de días de lluvia. El gobierno de Maharashtra reconoce la necesidad de un cambio estructural para hacer que la agricultura sea más sostenible y desea desarrollar la resiliencia climática en la agricultura, que este proyecto apoyará al gobierno en su logro", explicaron en su presentación Patrick Verissimo, economista jefe de Agricultura y Ranjan Samantray, especialista en agricultura, ambos líderes del equipo de tareas del Banco Mundial para el proyecto.

En África destacan, por ejemplo, el proyecto de agricultura climáticamente inteligente en Níger, donde 123.000 agricultores han tenido acceso a semillas tolerantes a la sequía y 60 alcaldes han recibido capacitación sobre cómo implementar este enfoque. En Zambia, el Banco Mundial apoya los esfuerzos del Gobierno para ampliar la agricultura climáticamente inteligente con un importe de más de 800.000 dólares en pagos a grupos de agricultores que se comprometen a reducir emisiones de carbono y que de esta manera están reduciendo la pérdida de bosques y promoviendo el enfoque de la agricultura climáticamente inteligente. 

La agricultura climáticamente inteligente (Climate-Smart Agriculture, CSA) es un enfoque integrado para la gestión de paisajes (tierras de cultivo, ganado, bosques y pesquerías) que aborda los desafíos interrelacionados de la seguridad alimentaria y el cambio climático. Tiene como objetivo lograr simultáneamente tres resultados. En primer lugar, un aumento de la productividad: producir más alimentos para mejorar la seguridad alimentaria y nutricional y aumentar los ingresos del 75 por ciento de los pobres del mundo, muchos de los cuales dependen de la agricultura para su sustento. En segundo lugar, una capacidad de recuperación mejorada: reducir la vulnerabilidad a la sequía, las plagas, las enfermedades y otras crisis; y mejorar la capacidad de adaptarse y crecer frente a las tensiones a largo plazo, como las temporadas acortadas y los patrones climáticos erráticos. Por último, emisiones reducidas: persiga emisiones más bajas para cada caloría o kilo de alimentos producidos, evite la deforestación de la agricultura e identifique formas de absorber el carbono de la atmósfera.

Hasta ahora, el Banco Mundial participa en 21 proyectos en los siguientes países: Argentina, Colombia, Costa Rica, El Salvador, Granada, México, Perú, Nicaragua, Uruguay, Kenya, Rwanda, Senegal, Mozambique, Tanzania, Zambia, Uganda, Sri Lanka, Bangladesh, Pakistán, Bhutan, Nepal, Filipinas y Moldavia.