viernes, 23 de marzo de 2018

Ecología y Biotecnología de Suelos, nueva unidad del Instituto de Biotecnología Vegetal de la UPCT

El Instituto de Biotecnología Vegetal (IBV) de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) cuenta con siete equipos de trabajo, tras la incorporación de los investigadores José Álvarez Rogel, Ángel Faz, Héctor Conesa, Raúl Zornoza y Marín Soriano, que conforman la unidad de Ecología y Biotecnología de Suelos.



La unidad es una de las novedades que recoge la memoria 2016 que acaba de publicar el IBV, que ha actualizado el modelo de sus memorias, optando por el idioma inglés en exclusiva y condensando la información más importante “al estilo anglosajón, para que se pueda leer con facilidad en cualquier parte del mundo”, explicó el director del Instituto, Marcos Egea. 

“La investigación es un trabajo de comunidad internacional. Pretender que sea local es como si el campo de Cartagena sólo cultivase para el mercado de Santa Florentina”, añadió.

La memoria también recoge la incorporación al IBV de técnicos titulados en Formación Profesional, contratados durante un año por la UPCT merced a un programa de ayudas de la Comunidad Autonóma, informaron fuentes de la UPCT. “Hemos tenido mucha suerte con los tres técnicos en FP que han estado con nosotros este año. La pena es que tengan que irse”, subraya Egea.

Por unidades, la de Tecnología e Ingenieria de Procesos Biotecnológicos, dirigida por Antonio López, publicó cinco artículos en revistas internacionales y presentó cuatro comunicaciones en congresos. El empaquetado de cartón que alarga la vida útil de frutas y verduras y un agente natural antestesiador de pescado para las piscifactorías fueron sus proyectos de investigación que contaron con financiación pública. También obtuvo contratos con ElPozo y Zukan.

La unidad en Microbiología y Seguridad Alimentaria, que dirige Alfredo Palop, publicó cuatro artículos en revistas indexadas y presentó una tesis doctoral. Desarrolló dos proyectos, sobre seguridad microbiana y esterilización de residuos mediante microondas, financiados por el Gobierno central y uno, sobre el uso de las emulsiones de d-limoneno contra los patógenos, por una compañía agroalimentaria.

En Metabolitos Secundarios, liderada por Antonio Calderón, se realizaron tres publicaciones y tres proyectos financiados, uno por Séneca y dos por el MINECO. Sobre acumulación de compuestos antioxidantes según el estrés de las plantas, fitomanejo de residuos mineros empleando biochar y especies arbóreas y uso de composts en la producción de rúcula y lechuga baby-leaf.

En Calidad Alimentaria y Salud, cuya responsable es Encarna Aguayo, se obtuvieron datos de la mejora de calidad en los smoothies utilizando procesos de calentamiento cortos e intensos. También se identifacron en nueces y almendras marcas de oxidación y se enriquecieron zumos para reducir dolores de los atletas de fondo. Se desarrollaron tres proyectos, uno de ellos financiado por Mineco. Se publicaron cuatro papers y tres tesis.

En Genética Molecular, que dirige Julia Weiss, se desarrolló un nuevo sistema de análisis automatizado de fenotipos y se realizaron dos proyectos, sobre determinación de emisión de volátiles florales, y control genético del desarrollo del petálo. Se publicaron cuatro papers.

En Resistencia a Insecticidas, de la que es responsable Pablo Bielza, se estudió la resistencia a pesticidas del pulgón verde del melocotón. Desarrollaron una herramienta biotecnológica contra infecciones en solanáceas y cucurbitáceas y optimizado las dosis de defensa poscosecha aplicadas al limón. Desarrollaron seis proyectos y publicaron dos papers.

En Recursos Fitógenéticos, que dirige María José Vicente Colomer, se llevaron a cabo dos proyectos, uno financiado por la UE, para la promoción de las legumbres, y otro por el Mineco, sobre el uso de composts en la producción de rúcola y lechuga baby-leaf. Se publicaron dos papers.