El resumen ejecutivo del análisis de soluciones para el objetivo del vertido cero al Mar Menor, realizado por el Ministerio para la Transición Ecológica, propone la "gestión y atenuación" de la demanda hídrica para reducir al máximo la llegada de nutrientes a la laguna.
Cadena Ser: https://bit.ly/2GOuXUC
El resumen ejecutivo del análisis de soluciones para el objetivo del vertido cero al Mar Menor, realizado por el Ministerio para la Transición Ecológica, propone la "gestión y atenuación" de la demanda hídrica para reducir al máximo la llegada de nutrientes a la laguna.
El documento, publicado tras ser sometido a información pública entre junio y septiembre de 2018, recomienda también la eliminación de las superficies de regadío no ligadas a las concesiones; la delimitación de perímetros de regadío; la cobertura de seguros para el regadío; el cierre de los pozos sin concesión; la constitución de comunidades de usuarios de aguas subterráneas; y la declaración de sobreexplotación de los acuíferos de la comarca.
Evitar la transferencia de contaminantes urbanos cubriendo las necesidades de infraestructuras de depuración y aumentando la calidad de los efluentes de las depuradoras, descontaminar y restaurar las vertientes de Sierra Minera; y retener sólidos y reducir arrastres de suelos con el aumento de cobertura vegetal adaptada a las condiciones del lugar son otras recomendaciones incluidas en el resumen ejecutivo.
Además, el documento realizado por Tragsatec aboga por potenciar el trasvase de empleo desde la agricultura a la gestión forestal; promocionar la utilización de energías alternativas; internalizar los costes ambientales en las actividades productivas; introducir progresivamente cambios en los modelos productivos agrarios para adaptación a las exigencias futuras de los mercados.
En cuanto a la gestión del agua, el ministerio apuesta por constituir comunidades de usuarios de aguas subterráneas, extraer cierto volumen del acuífero cuaternario mediante drenes próximos a la costa, un sistema de impulsión y conducciones de los caudales a dos plantas en El Mojón (San Pedro del Pinatar) y al sur de la laguna, para la desalobración y desnitrificación de los volúmenes transportados.
Asimismo, la explotación de las aguas subterráneas se reconvierte a un sistema de 99 pozos de régimen centralizado e interconectado mediante conducciones, que serán llevados a las dos desalobradoras, lo que conlleva un programa de clausura de pozos no controlados causantes de contaminación cruzada.
El documento identifica tres escenarios con sus correspondientes niveles de inversión. Así, el escenario tendencial supone continuar las acciones que vienen desarrollándose hasta ahora, lo que generaría un gasto de 45 millones de euros, mientras que el adaptativo y temporal, que contempla las actuaciones mencionadas anteriormente hasta 2027, conllevaría destinar entre 620 y 1.094 millones de euros.
El volumen de la inversión pública, con independencia de que parte de ella se traslade finalmente a los usuarios privados a través de los mecanismos disponibles de recuperación de costes, se sitúa en valores de partida que varían entre 45,83 y 297,69 millones, con un valor en el escenario intermedio de 221,69 millones.
Por otra parte, el ministerio recuerda que el vertido cero que se establece como objetivo se refiere a evitar, o reducir al máximo posible, los aportes de contaminación al Mar Menor, por lo que "no se debe entender como flujo hídrico cero" de aportaciones hídricas, sino como una tendencia hacia la reducción y eliminación de caudales contaminados que alcanzan la laguna y han contribuido durante décadas a su eutrofización.
El informe concluye que la laguna sufre las presiones provenientes de la eutrofización; la llegada de contaminantes procedentes de la actividad agraria; la persistencia en el tiempo de una carga enorme de nutrientes y agroquímicos; la interconexión mediante pozos de captación entre las formaciones acuífero superficiales y profundos; y la sobreelevación del nivel freático por los retornos del regadío.
El ministerio también advierte que la laguna queda en un estado de "enorme vulnerabilidad", por lo que cualquier presión sobre ella "sólo puede agravar su situación".
¿ Qué valoración hacen los agricultores?
Manuel Martínez, presidente de la Comunidad de Regantes del Campo de Cartagena dice que este documento les deja "una sensación agridulce", ya que "algunos puntos están bien recogidos", pero otros, como el cierre de los pozos "resulta farragoso". Apuesta por que se haga un uso correcto de estos pozos "que se puede hacer".
Además, el documento realizado por Tragsatec aboga por potenciar el trasvase de empleo desde la agricultura a la gestión forestal; promocionar la utilización de energías alternativas; internalizar los costes ambientales en las actividades productivas; introducir progresivamente cambios en los modelos productivos agrarios para adaptación a las exigencias futuras de los mercados.
En cuanto a la gestión del agua, el ministerio apuesta por constituir comunidades de usuarios de aguas subterráneas, extraer cierto volumen del acuífero cuaternario mediante drenes próximos a la costa, un sistema de impulsión y conducciones de los caudales a dos plantas en El Mojón (San Pedro del Pinatar) y al sur de la laguna, para la desalobración y desnitrificación de los volúmenes transportados.
Asimismo, la explotación de las aguas subterráneas se reconvierte a un sistema de 99 pozos de régimen centralizado e interconectado mediante conducciones, que serán llevados a las dos desalobradoras, lo que conlleva un programa de clausura de pozos no controlados causantes de contaminación cruzada.
El documento identifica tres escenarios con sus correspondientes niveles de inversión. Así, el escenario tendencial supone continuar las acciones que vienen desarrollándose hasta ahora, lo que generaría un gasto de 45 millones de euros, mientras que el adaptativo y temporal, que contempla las actuaciones mencionadas anteriormente hasta 2027, conllevaría destinar entre 620 y 1.094 millones de euros.
El volumen de la inversión pública, con independencia de que parte de ella se traslade finalmente a los usuarios privados a través de los mecanismos disponibles de recuperación de costes, se sitúa en valores de partida que varían entre 45,83 y 297,69 millones, con un valor en el escenario intermedio de 221,69 millones.
Por otra parte, el ministerio recuerda que el vertido cero que se establece como objetivo se refiere a evitar, o reducir al máximo posible, los aportes de contaminación al Mar Menor, por lo que "no se debe entender como flujo hídrico cero" de aportaciones hídricas, sino como una tendencia hacia la reducción y eliminación de caudales contaminados que alcanzan la laguna y han contribuido durante décadas a su eutrofización.
El informe concluye que la laguna sufre las presiones provenientes de la eutrofización; la llegada de contaminantes procedentes de la actividad agraria; la persistencia en el tiempo de una carga enorme de nutrientes y agroquímicos; la interconexión mediante pozos de captación entre las formaciones acuífero superficiales y profundos; y la sobreelevación del nivel freático por los retornos del regadío.
El ministerio también advierte que la laguna queda en un estado de "enorme vulnerabilidad", por lo que cualquier presión sobre ella "sólo puede agravar su situación".
¿ Qué valoración hacen los agricultores?
Manuel Martínez, presidente de la Comunidad de Regantes del Campo de Cartagena dice que este documento les deja "una sensación agridulce", ya que "algunos puntos están bien recogidos", pero otros, como el cierre de los pozos "resulta farragoso". Apuesta por que se haga un uso correcto de estos pozos "que se puede hacer".
En declaraciones a esta redacción, Manuel Martínez dice que les da la
sensación que plantean soluciones y luego no se tienen en cuenta. Por
eso, añade, "espero que esto no sea una foto fija" y se puedan consensuar y modificar algunas medidas para conseguir ese vertido cero.