La firma del acuerdo ha tenido lugar tras una reunión entre la alcaldesa, el delegado del Gobierno, el presidente de la CHS y el presidente de la Comunidad de Regantes.
La Confederación Hidrográfica del Segura ha autorizado hoy martes la apertura de 164 pozos de sequía privados que se encuentran en el Campo de Cartagena, tras una reunión a la que han asistido la alcaldesa de Cartagena, Ana Belén Castejón, el delegado del Gobierno, Diego Conesa, el presidente de la CHS, Mario Urrea, y el presidente de la Comunidad de Regantes de Cartagena, Manuel Martínez.
Gracias a este acuerdo, los agricultores del campo de Cartagena podrán extraer un máximo de 9,3 hectómetros cúbicos de agua al año que irán destinados a una superficie de riego de 2.980 hectáreas dentro de la zona regable, lo que significa que no implica la creación de nuevas superficies de regadío.
Los 164 pozos que se van a reabrir son los que cuentan con la Declaración favorable de Impacto Ambiental, de hecho, se ha denegado la autorización para otros 88 pozos porque no cumplían las condiciones ambientales y su apertura habría supuesto un perjuicio para el Dominio Público Hidráulico (DPH).
Cabe recordar que el pasado mes de agosto la alcaldesa se comprometió con los representantes del sector agrícola del campo de Cartagena a trasladar a la CHS su petición de reabrir estos pozos de sequía. “Esta es una reivindicación que nuestros agricultores tenían pendiente desde el año 2013, por lo que para mí es una satisfacción que, en tan sólo 5 meses, se haya resuelto una necesidad que ha estado bloqueada durante los últimos 5 años. El papel de la Delegación de Gobierno ha sido vital para agilizar los trámites que han hecho posible esta autorización”, ha señalado la alcaldesa.
El permiso que se ha otorgado esta mañana es provisional y tiene un plazo de vigencia de un año durante el cual los usuarios pueden obtener una autorización definitiva para continuar extrayendo caudales del acuífero, siempre que cumplan con los siguientes requisitos: la mezcla de los caudales extraídos con otros recursos con menos salinidad para evitar afecciones al DPH, los sondeos deberán tener instalados contadores volumétricos y pasar controles de calidad química.